Me he ido enterando algo más en lo referente a las “agresiones” sexuales de Julian Assange. Por lo que me ha parecido entender el tema tiene mucho que ver con el látex. Ese invento demoníaco que deja a los óvulos para vestir santos, a los espermatozoides siguiendo su fiesta bajo la carpa e impide que enfermedades, susceptibles de convertir la Tierra en una nueva Sodoma, sean frenadas, para menor gloria de Dios.
Vamos a ver Julian, que parece ser que no te enteras. ¿No sabes que hasta el Papa los acepta en algunos casos concretos?
Claro que podría ser otra cosa. Digo yo: ¿Y si el hecho de que el Vaticano los acepte viene dado precisamente por el tema de Wikyleaks? Porque, y ahora juego a hacer ficción, si el Vaticano no hubiera aceptado el látex, bien podría haber ido el amigo Assange a buscar asilo allí, argumentando que su idea era la de seguir fielmente los dictados del dogma anti condonero. Eso, ciertamente, hubiera puesto a la curia vaticana en una situación jodida para con su amigo americano y amigos de éste.
Mira, no sé que pensar. Para la siguiente, prepárate un buen firewall de goma y evítate problemas. Piensa que a los otros, a los que joden de verdad, a la que les dejas una puertecita abierta se te cuelan hasta la cocina, y si no, te montan un Guantánamo en dos días y que no les tosa nadie.
Por otro lado, si alguien piensa que voy errado, que me lo haga saber.
Gracias.
No hay comentarios:
Publicar un comentario