lunes, junio 11, 2012

La cultura de la codicia, el compadreo y el arribismo en las cajas de ahorros españolas




El comportamiento de los ejecutivos en las cajas de ahorro españolas está bajo la lupa precisamente cuando el sector se prepara para pedir el rescate de los contribuyentes.
Mientras los contribuyentes europeos se preparan para rescatar a los bancos enfermos, los fiscales anticorrupción, los académicos y los parlamentos regionales han empezado a descubrir una historia de codicia, compadreo y arribismo político que ha llevado a caer a muchas de las principales cajas de ahorro del país.
Con el cuarto mayor banco del país -Bankia- reclamando 19.000 millones de euros y las autoridades admitiendo por fin que serán necesarios 9000 millones más para salvar a  otras dos antiguas cajas de ahorro -CatalunyaCaixa y Novagalicia- , la preocupación se centra en el montante creciente y en la manera en la que se han dirigido los bancos.
Los investigadores judiciales analizan también los pagos a antiguos altos cargos y la salida a bolsa de Bankia, en la que 350000 pequeños inversores vieron cómo dos tercios de su dinero se desvanecían.
El importe total que deben pagar los fondos de rescate europeo se ha incrementado a causa de las indemnizaciones multimillonarias recibidas por algunos de los antiguos altos cargos poco tiempo antes de que los bancos se fuesen a pique, así como por las decisiones tomadas por miembros no-cualificados de sus consejos de administración que, ahora, reconocen su incapacidad para analizar las cuentas de los bancos. Consejos de administración abarrotados de puestos políticos y de personas cuyo conocimiento sobre la banca es prácticamente nulo -incluyendo, en un caso, un cajero de supermercado-.
Miembros que a menudo se limitaban a firmar decisiones que otros tomaban previamente y que, además, eran recompensados con puestos bien pagados en consejos de administración de compañías subsidiarias, con viajes de lujo a lugares exóticos y con "créditos blandos".
Viajes a la India, China o Chicago y los cientos de millones de euros prestados a ejecutivos, directivos y familiares formaron parte del sabroso plato de favoritismo politico y tráfico de influencias.
Los miembros de los consejos eran a menudo políticos sin preparación y, por ello, los investigadores académicos perciben una relación estrecha entre el montante de la mala contabilidad y la inexperiencia, falta de cualificación y grado de politización de los consejos directivos.
Un comité del parlamento regional valenciano está investigando cómo la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM) -descrita por el Banco de España como "lo peor de lo peor"- quebró el pasado julio.
"¿Que si comprobé las cuentas?" responde José Enrique Garrigós, un modesto hombre de negocios que llegó a ser miembro del consejo de administración de la CAM "Mire, soy un empresario corriente; no tengo el tiempo o la formación para hacer eso".
Él mismo reconoció que otros miembros de la caja de ahorros, radicada en Alicante, al Este de España, incluían un cajero de supermercado y un sociólogo. Se ha dicho también que un profesor de baile, un artista y un psicólogo universitario formaban parte del mismo consejo.
"Las cosas que hemos oído son surrealistas" dijo Mireia Mollà, diputada regional del partido de izquierda Compromis. "Todavía no sabemos cuáles fueron las indemnizaciones que recibieron los directivos cuando abandonaron el barco".
Algunos miembros del consejo han sugerido que las actas de las reuniones podrían haber sido falseadas. Preguntan, por ejemplo, si alguna vez fueron consultados en asuntos capitales como los pagos a ejecutivos o las advertencias del Banco de España de que la caja estaba en una situación muy complicada.
"Nunca vi las actas oficiales a las que la ley obliga", declara Jesús Navarro, otro miembro del consejo "salvo en la pantalla de un ordenador".
Para estudiar las cuentas hubiese necesitado ser una "superwoman", se lamenta otro miembro del consejo de la CAM. "No tenía los conocimientos suficientes: ni financieros, ni legales, ni contables… Los miembros del consejo no estaban obligados legalmente a tener ningún tipo de formación o experiencia", afirma su compañero en la junta directiva Juan Pacheco.
Todo lo anterior dejó el control de la CAM en manos de Modesto Crespo, del director general Roberto López Abad y de otros pocos directivos -afirman- con el consejo limitado simplemente a firmar sus decisiones.
"No había apenas ningún debate y las votaciones eran… unánimes" declara Pacheco.
"Un consejo de administración al año se organizaba en el extranjero", comenta Navarro. "Yo me negaba a asistir por principios" Pero, sin embargo, admite haber acudido a una reunión a cientos de kilómetros -en San Sebastián- con otras cincuenta personas: "Obviamente, fui con mi mujer. El resto del consejo también acudió con sus parejas".
Durante seis años, los miembros del consejo y los ejecutivos de más antigüedad -o sus familias- recibieron 161 millones de euros en prestamos blandos, a menudo con intereses muy bajos, según C.C.O.O. Los mismos ejecutivos han visto doblados sus salarios a lo largo de ese periodo.
Las cajas de ahorros en su conjunto concedieron a sus dirigentes un incremento del 50% de sus sueldos durante ese tiempo, aunque los beneficios sólo aumentaron en un 7%, añade el sindicato.
Mireia Mollà, la diputada de Compromis, declaró que una forma de salvar los límites salariales en los consejos de administración de la CAM -una entidad sin ánimo de lucro- fue otorgarles puestos bien pagados en los consejos de compañías propiedad -total o parcial- del banco.
Los políticos locales escogían a muchos de sus miembros y usaban las cajas para financiar sus proyectos.
"El uso de las cajas como bancos para los gobiernos regionales es parte del origen del problema", declaró Álvaro Anchuelo, diputado del pequeño partido centrista UPyD. "Los usaron para financiar aeropuertos sin vuelos conocidos y parques temáticos ruinosos".
Dos días antes de la quiebra de la CAM, el banco prestó 200 millones de euros al arruinado gobierno de la Comunidad Valenciana -dirigida por compañeros de Mariano Rajoy en el Partido Popular, que además controlaba la mayoría de los nombramientos del consejo-.
Parte de los directivos de la CAM había optado por prejubilarse mientras el banco se dirigía al desastre; seis miembros, incluyendo a su director, López Abad, abandonaron sus cargos con indemnizaciones que en total superaron los 10 millones de euros.
Historias similares de pagos multimillonarios están surgiendo de otras cajas, que ahora han sido obligadas a fusionarse o a ser absorbidas para formar bancos comerciales -con las cajas de ahorro como accionistas-.
Bankia, por ejemplo, pagó al directivo Matías Amat 6.200.000 euros en concepto de jubilación. Bancaja, una de las siete cajas que se fusionaron para formar Bankia, le debe aún a Aurelio Izquierdo 14 millones de euros.
La CAM fue nacionalizada y vendida al Banco Sabadell por 1€, después de recibir 3000 millones de euros del FROB, que ahora parece incapaz de asumir el rescate de otras antiguas cajas de ahorros.
Los intentos de investigar Bankia han sido bloqueados por el Partido Popular en el Parlamento y en la propia Comunidad de Madrid, pero el fiscal general del estado ha anunciado la apertura de una investigación. Doce de las cuarenta y cinco cajas que existían hace tres años están siendo investigadas por anticorrupción.
El jueves, el parlamento catalán aprobó formar un comité para tratar los problemas de la banca en su conjunto.
"Si realmente supiésemos la verdad acerca de Bankia y las otras cajas, los dos partidos mayoritarios -el Partido Popular y el PSOE- explotarían", afirma Arsenio Escolar, director del diario 20 Minutos.

2 comentarios:

Javier Marcos dijo...

Sigue así, que se oiga y que se sepa la verdad, que con el paripe que nos cuentan en algunos medios y lo que nos dicen la panda de vagos de políticos que tenemos en este país, no nos podemos enterar de la mitad de lo que pasa realmente.

Saludos.

Unknown dijo...

Gracias Javi.
Lo cierto es que ya no sé para donde tirar.
Esto se está convirtiendo en un absurdo que sobrepasa el entendimiento de un ciudadano y que solo puede ser comprendido por los hijos de la gran puta, pertenezcan estos al estamento que sea.
Seguimos en la lucha.