El Papa y los condones

¡Gloria a Dios! Hosanna in excelsis.

Parece ser que el gerente del Dios católico ha decidido hacer un pequeño cambio en lo relativo al condón y aceptar que en contados casos es un mal menor. Ir de putas, por poner un ejemplo.

No quiero engañaros. Este tipo de aceptaciones a mi me van mal. Imaginad que de a poco la iglesia va dejando su estricto fundamentalismo y se va acercando a mis premisas amorales y pecaminosas, ¿Con quién me meteré entonces? Vale, si, con lo políticos y el sistema. Pero, ¡coño! Es que a mí, lo que más me gusta, es meterme con la religión en general y el catolicismo en particular. Habrá que joderse entonces.

Pero me queda otra para el entretenimiento. Para ello vamos a jugar a imaginar:

Imaginad un mundo católico en el que su gerente establece que si un señor católico va de putas y usa condón, se le mitiga el pecado. Digamos que de mortal pasa a mortal (nunca lo entendí pero creo que hay pecados más chiquitos que otros), o bien se decide que ya no es pecado.

Pues bien, vuelve ese señor a su casa, relajado, con el depósito liberado de amor urgente, y le dice a su mujer católica, rodeada de siete retoños – Maruja, ya no tendremos más niños. Desde hoy tú haces de puta y yo de putero. Nos ponemos condón y a darle al émbolo que no es pecado.

Pasado un tiempo, la Maruja en cuestión, aunque sonrojándose, relata las recientes proezas sexuales del taladro con funda de su marido a un reducido número de católicas como ella…

No me extenderé; pero la conclusión es que pasado un tiempo, todo el género femenino católico se ha sacado el carnet de puta y sus respectivos, aunque ya lo eran a escondidas, han pasado a ser puteros declarados.

Y me olvidaba, la empresa Durex y Control ganado dinero a espuertas.

Por cierto, se me olvidaba. ¿Sabe alguien si el Vaticano es socio de alguna de esas dos empresas?